La actividad física es altamente recomendable en el Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP), para contrarrestar los factores asociados al mismo, tales como el sobrepeso, resistencia a la insulina, hiperandrogenismo y Hormona Antimulleriana (HAM).
Existen actualmente numerosos estudios en los que se evidencian los beneficios del ejercicio físico en enfermedades tales como Cáncer, Diabetes, Hipertensión, entre otras, si bien, hay pocos en relación con el Síndrome de Ovario Poliquístico.
Empecemos explicando qué es.
Síndrome de Ovario Poliquístico
A lo largo de la vida la mujer experimenta varios cambios a nivel físico y hormonal.
En la adolescencia es dónde se llevan a cabo una una serie de transformaciones que da lugar al proceso natural de poder ser portadora de vida. Pero pueden aparecer alteraciones que no favorezcan ese correcto desarrollo.
Una de ellas es el Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP), que es la causa más común de infertilidad, afectando 10%-15% de mujeres en edad reproductiva.
Características del SOP
Este síndrome arrastra muchos factores negativos para la salud, por eso debe ser tenido muy en cuenta y tomárselo seriamente, sobre todo en relación a la necesidad de cambiar ciertos hábitos de vida por parte de las afectadas, eso mejorará en gran medida su salud.
Características del SOP:
- disfunción menstrual,
- ovarios Poliquísticos,
- obesidad, sobrepeso,
- trastornos del sueño,
- resistencia a la insulina,
- hipertensión,
- está estrechamente relacionada con varios factores de riesgo de enfermedad cardiovascular.
A partir de estos puntos anterior, es donde la actividad física cobra una gran importancia a la hora de mejorar y contrarrestar los factores asociados a este síndrome.
Es por ello que a la hora de afrontar este problema, la afectada debe ser informada de todos los beneficios que le aportará la adaptación de hábitos saludables a su vida e intentar en la mejor medida posible, mejorar su calidad de vida.
El aporte de ejercicio físico para la mejora de los factores asociados al SOP
La obesidad en el Síndrome de Ovarios Poliquísticos, es motivo de preocupación, ya que contribuye a la resistencia a la insulina, el hiperandrogenismo y trastornos reproductivos, aumentando además el riesgo de diabetes, enfermedades cardiovasculares y otras afecciones crónicas en las mujeres que lo padecen.
En estudios realizados acerca del impacto del ejercicio físico sobre los factores asociados al SOP, se concluyó que la práctica regular de ejercicio físico programado, proporcionó una disminución en la circunferencia de cintura, mejora del consumo máximo de oxígeno y pérdida de peso, lo cual conllevó a la mejora de las anormalidades metabólicas y reproductivas asociadas a este síndrome.
Además, otros estudios que respaldaban los beneficios del ejercicio físico, hacían constar que esos beneficios se multiplican si se realizan entrenamientos de alta intensidad, tales como los HIITs, que a su vez presentan mejoras sobre la resistencia a la insulina.
El ejercicio físico programado y supervisado por un profesional especializado y con experiencia en el campo de las mujeres que sufren el SOP, es MUY EFECTIVO para la mejora del control de peso y composición corporal así como la función reproductiva.
En definitiva, incluir ejercicio físico como hábito y estilo de vida saludable, no es solo favorable para el tratamiento de enfermedades como la descrita en este artículo, sino también para la prevención de las mismas, por lo cual debemos darle un valor más importante para la mejora de la calidad de vida de la sociedad actual.