¿Qué es realmente para ti un buen entrenamiento? Cada uno tenemos un concepto diferente, algunos piensan que el buen entrenamiento es aquel que deja «muerto», «reventado», «hecho polvo», pues NO, no debe ser así, al menos no siempre terminar con esas sensaciones.
Un buen entrenamiento es aquel que sí, te deja cansado y sentirás el trabajo, pero que te permita continuar con tu vida: ir al supermercado, dar un paseo, tomar una cerveza con alguien, jugar con tus hijos, etc.
Cuando pensamos en un buen entrenamiento, tenemos que hacerlo de forma global, no se trata de cómo lo sientas tú, sino en general, de cómo debería ser, tanto para una persona con buena condición física, como para una sedentaria, personas mayores, adolescentes, etc., un buen entrenamiento para todo el mundo.
Pregunté a una de mis clientas qué era para ella un BUEN ENTRENAMIENTO, Ana lleva conmigo entrenando cinco meses y viene cada día a su sesión de entrenamiento personal, se comprometió a traerlo escrito al día siguiente en forma de «10 mandamientos»
Y así fue, su respuesta fue 100% acertada, por eso lo comparto con vosotros.
Los 10 mandamientos de un buen entrenamiento:
1.- No te engañes a ti mismo: si te engañas es porque quieres, nadie te obliga, te mentirás a ti mismo y eres el único que saldrás perjudicado.
2.- Lo que tengas que hacer, hazlo bien: hacerlo mal es perder el tiempo y el dinero.
3.- Sé cabezon/a, aunque algo no te salga a la primera, no abandones, sigue intentándolo porque sino, te sentirás frustrado y eso te llevará a la desgana.
4.- Ten en cuenta que el entrenamiento es primordialmente para estar saludable, no te empeñes en conseguir un físico considerado como «diez», todos somos «diez» mientras estemos saludables.
5.- Cada uno tenemos nuestros límites y hay que saber hasta dónde se puede llegar, además, día a día con el ejercicio constante, este límite se va aumentando y llegarás cada vez más lejos.
6.- Hay que ser sincero con uno mismo y admitir los errores, acepta las correcciones de tu entrenador porque al fin y al cabo, es por tu bien, única y exclusivamente para que mejores tú, y nadie más.
7.- Da lo mejor de ti mismo, si acabas tu entrenamiento con sentación de satisfacción y cansado, aunque en forma, es que lo has hecho bien y en la intensidad que tocaba.
8.- No te quedes a medias, si acabas tu entrenamiento igual que antes de empezarlo y sin sensación de haber generado adrenalina, es que podrías haber dado un poco más.
9.- El respeto por uno mismo es la base de cualquier disciplina, así como el respeto hacia los demás, no te mofes del que no es capaz o del que se cansa antes, apóyale si tienes oportunidad, todos hemos empezado desde cero.
10.- Hay que ser constante, sin la constancia no se consigue nada en la vida.
Cuánta razón tiene Ana, y cómo me alegra haberle transmitido toda la esencia de un buen entrenamiento.
Es un buen resumen de lo que puede llegar a significar el ejercicio físico en la vida de todo ser humano y cómo debe ser realmente un buen entrenamiento, principalmente debe incluir RESPETO A TU ENTRENADOR/A Y A TI MISMO, CONSTANCIA, DISCIPLINA, HONESTIDAD Y FUERZA DE VOLUNTAD.
Así, sí podemos definir un buen entrenamiento para todos, para el más preparado y el que menos lo está, todos y cada uno de ellos pueden llegar a hacer un muy buen entrenamiento dentro de sus capacidades, ahí está realmente la clave, mejorar poco a poco dentro de nuestras capacidades, sin compararnos con nadie más.
